¿Alergias e intolerancias alimentarias.? Lo primero que tenemos que hacer es recalcar que no son lo mismo, aunque en algunos casos surgen con una sintomatología parecida.
Alergias e intolerancias alimentarias
Una alergia alimentaria se desencadena cuando nuestro sistema inmune detecta un alimento como un agente invasor y peligrosos. Esto provoca una serie de reacciones desproporcionadas en las que se liberan sustancias como las inmunoglobulinas E (anticuerpos que luchan contra el invasor) y la histamina. La reacción es aguda y rápida.
Síntomas de la alergia alimentaria
Los síntomas pueden ser: tos, problemas en la respiración, opresión en la garganta, problemas de piel como urticaria, inflamación, bajada de la tensión, dolor de estómago, diarrea…
En algunas ocasiones la alergia puede desencadenarse sin ni siquiera haber probado el alimento, basta con olerlo o tocarlo.
Intolerancias alimentarias
En cambio, las intolerancias alimentarias, son reacciones de hipersensibilidad mediadas por anticuerpo IgG.
Los síntomas de la intolerancia son más moderados, diversos y de tipo crónico:
- Trastornos gastrointestinales: dolor abdominal, diarrea o estreñimiento, gases, inflamación abdominal, retortijones, náuseas, úlceras, acidez, gastritis, colitis…
- Alteraciones dermatológicas: acné, eczemas, psoriasis, urticaria…
- Molestias neurológicas y psicológicas: dolor de cabeza, migraña, mareo, nerviosismo, depresión, irritabilidad, fatiga, hiperactividad…
- Alteraciones respiratorias: asma, rinitis, tos…
- Trastornos del sistema locomotor: inflamación de las articulaciones, dolor, rigidez, fibromialgia …
- Otros: sobrepeso u obesidad…
No suelen darse todos en una misma persona.
“Entre el 25% y el 35% de la población padece alguna intolerancia alimentaria.”
En la alergia la reacción es prácticamente inmediata y en muchas ocasiones es necesario acudir de inmediato a un hospital. Mientras que la intolerancia es más silenciosa, no hay una relación clara causa-efecto. Es más, podemos llevar años teniendo los síntomas y no saber que tenemos dicha intolerancia, por ejemplo, síntomas tan comunes como gases, estreñimiento, o dolor de cabeza. Estos pasan a formar parte de nuestro día a día y convivimos con ellos, sin saber que sería tan fácil como quitar ciertos alimentos de la dieta para notar una mejoría sorprendente.
¿Cómo detectar una intolerancia?
Existen muchos test de intolerancia alimentaria, pero son los de sangre los que sin duda van a ser más fiables en la detección de estos alimentos, que nos están provocando hipersensibilidad.
El test de sangre evalúa la reacción del sistema inmune ante determinados alimentos y determina la presencia de anticuerpos IgG frente a proteínas de la dieta.
La eliminación de aquellos alimentos que nos causan hipersensibilidad proporciona una notable mejoría en un alto porcentaje de pacientes.
Lo ideal es que una vez detectados los alimentos que provocan esta reacción sea un nutricionista el que paute una dieta adecuada y balanceada para que no se produzcan carencias de ningún nutriente y no comprometa nuestra salud.
Por otra parte, cuando hemos consumido un alimento que no nos sentaba bien durante mucho tiempo; puede haber provocado daños en la mucosa o la pared intestinal que conviene reparar. Para ello desde Fisiolution en el servicio de nutrición, disponemos de un protocolo natural de limpieza, desinflamación y regeneración del intestino. El cual, acompañado de la dieta, va a hacer que nos sintamos más ligeros, perdamos peso, sanemos y en general mejoremos todos los síntomas que nos estaban atormentando.
Bibliografía
Inmunología: Biología y patología del sistema inmunitario
J.R. REGUEIRO GONZALEZ. Ed. Panamericana.