El suelo pélvico está formado por una serie de músculos y ligamentos que cierran el suelo del abdomen manteniendo la vejiga, el útero y el recto en posición correcta en contra de la gravedad. La debilidad de estos músculos puede ocasionar prolapsos, incontinencia urinaria, fecal y disfunciones sexuales.
Existen varias causas que afectan a esta estructura, aunque en muchas ocasiones, su debilitamiento no sería tan severo si se tratase a tiempo.
Las causas más comunes de dicha patología son:
- Embarazo y parto son la principal causa del debilitamiento, debido a la presión que ejerce él bebe durante el embarazo y a la distensión muscular que sufren estos músculos durante el parto. Para evitarlo, es importante el trabajo del suelo pélvico con los ejercicios de Kegel (gimnasia hipopresiva no, ya que está contraindicada en el embarazo).
- Intervenciones quirúrgicas de la zona del periné.
- Herencia.
- Estreñimiento, tos, obesidad…
- Deportes de impacto que aumentan la presión abdominal.
Por lo tanto, fortalecer estos músculos te ayudará a mejorar el control de tu vejiga, conseguir una buena estática pelviana, facilitar el parto y mejorar el postparto, evitar el prolapso, acelerar el proceso de recuperación postcirugía y tratar disfunciones sexuales.
Desde Fisiolution clínica de fisioterapia Madrid Las Tablas, los ejercicios terapéuticos recomendados para el suelo pélvico son los siguientes:1. Ejercicios de Kegel.
Estos ejercicios se basan en contraer y relajar el músculo pubococcígeo con el objetivo de incrementar su fuerza y resistencia, y así evitar la incontinencia urinaria. Los ejercicios son los siguientes:
-El lento: Aprieta los músculos como si quisieras detener la orina. Contráelos y mantenlos así mientras cuentas hasta 5 respirando suavemente. Luego, relájalos durante 5 segundos más, y repite la serie 10 veces. Intenta aguantar progresivamente el tiempo de contracción y relajación.
-El rápido: Aprieta y relaja los músculos tan rápido como puedas hasta que te canses o transcurran 2 ó 3 minutos. Empieza con 10 repeticiones hasta alcanzar las 50 repeticiones diarias.
-El ascensor: Tu vagina es un tubo muscular con secciones en forma de anillo dispuestas una sobre otra. Imagínate que cada sección es una planta diferente de un edificio, y que subes y bajas un ascensor tensionando cada sección. Empieza subiendo el ascensor hasta la primera planta, aguántalo durante un segundo, y sube hasta la segunda planta. Sigue subiendo tantas plantas como puedas (normalmente no más de cinco). Para bajar, aguanta también un segundo en cada planta.
-La onda: Algunos músculos del suelo pélvico están dispuestos en forma de ocho, pero con tres anillos. Un anillo se sitúa alrededor de la uretra, otro alrededor de la vagina, y el último alrededor del ano. Contrae estos músculos de delante a atrás y relájalos de atrás a delante.
2. Gimnasia Abdominal Hipopresiva:
Es un conjunto ordenado de ejercicios posturales rítmicos que permiten la integración y la memorización de “mensajes propioceptivos sensitivos o sensoriales asociados con una postura particular provocando una caída de la presión abdominal y torácica, generando una activación automática de los músculos del perineo y de la faja abdominal y una relajación simultánea de los grupos musculares hipertónicos. Hay diversos ejercicios que van cambiando según el nivel de dificultad y todos se realizan en apnea, lo que permite quitar presión a la zona abdominal.
También es 100% recomendable el Pilates (Pilates embarazadas) debido a sus características es una gimnasia muy beneficiosa antes y después del embarazo, rehabilitación post quirúrgicas, bajar peso e ideal para pacientes de la tercera edad (Pilates adaptado claro está)
Por el gran éxito de esta terapia y sus buenos resultados, desde Fisiolution te animamos a realizarla, déjate guiar por nuestro fisioterapeutas especializados en terapia del suelo pélvico, ya que con un poco de trabajo bien dirigido empezarás a sentir mejor y recuperaras tu ritmo de vida normal en poco tiempo.