La Reeducación Postural Global o RPG parte de la individualidad de cada persona para diseñar un tratamiento global. Este parte de los síntomas que presenta, y busca y resuelve las causas que lo han provocado.
El cuerpo organiza sus gestos y movimientos a través de cadenas funcionales que se componen de una serie de músculos y articulaciones que ellos movilizan. Cuando algún componente de la cadena falla, toda ella se ve afectada. Esto puede producir la aparición de los síntomas en cualquier lugar, por lo que hay que tratar toda la cadena funcional corrigiendo todos sus componentes a la vez.
¿En qué consiste la Reeducación Postural Global o RPG?
El tratamiento de Reeducación Postural Global o RPG consiste en la realización de una serie de ejercicios de estiramiento global que van evolucionando desde una posición inicial hacia una de progresivo estiramiento. Esa posición final dependerá de cada persona. Estas posturas son realizadas por el paciente de forma activa. Siempre guiado y corregido en todo momento por el fisioterapeuta.
El paciente participa activamente en los estiramientos a través de la respiración, la realización de suaves contracciones musculares y el mantenimiento de las correcciones. En estas sesiones, el fisioterapeuta utiliza únicamente la terapia manual elongando los tejidos, reduciendo las tensiones y modelando el cuerpo del paciente.
El objetivo de este método es aliviar el dolor o los síntomas de forma duradera, evitar las compensaciones y corregir las deformidades.
¿Para quién va dirigido este método?
De forma general, este método está dirigido a la reducación de la postura y ganancia de la elasticidad. Esto puede recuperar bloqueos articulares y musculatura alterada.
De forma más específica, está indicado para:
- Deformidades en columna: escoliosis, hipercifosis, hiperlordosis, rectificaciones…
- Deformidades en miembros superiores e inferiores: escápulas aladas, pies cavos, pies planos, rodillas en valgo o varo…
- Patología dolorosa de columna: cervicalgia, tortícolis, dorsalgia, lumbalgia, ciáticas, hernias discales…
- Síntomas neurológicos de origen mecánico: adormecimiento y hormigueo en las manos, cefaleas, vértigos…
- Disfunciones respiratorias: bloqueo inspiratorio.
- Secuelas de traumatismos: recuperaciones postquirúrgicas.