El tratamiento de ondas de choque esta indicado en múltiples patologías y en distinto punto de su evolución: subagudo y crónico.
El tratamiento de ondas de choque (ESWT, del inglés “Extracorporeal Shock Wave Treatment”) se ha usado de manera efectiva desde hace más de 20 años en centros especializados en todo el mundo, y existe una sociedad internacional que vela por el desarrollo de esta técnica y sus aplicaciones, siendo los resultados la evidencia de su efectividad, y la sitúan como tratamiento de primera elección.
Las Ondas de Choque son efectivas, evitan intervenciones innecesarias, riesgos, en el análisis final, ahorra dinero al sistema de salud y acorta los procesos de curación.
Aplicar la terapia de Ondas de Choque ahorra al paciente, no solo una cirugía y sus complicaciones (disección extensiva de la pseudoartrosis, eliminación del tejido cicatrizado mediante limado y cincelado, así como también un trasplante de hueso, principalmente de la cresta iliaca del propio paciente), si no también largos periodos de hospitalización. No son necesarias las terapias con factores de crecimiento ni células madre. Permiten que la recuperación funcional sea más temprana, disminuye las limitaciones.
En el tratamiento con Ondas de Choque tan solo se han observado efectos secundarios menores, y no siempre, y estos son cuando se producen: inflamación y hematomas superficiales sin repercusión clínica.
Tras los estudios experimentales realizados, se comprobó que la patología mejoraba, y crecían los tejidos en:
- Pseudoartrosis (pseudoartrosis y fracturas con retardos de consolidación)
- Contusiones óseas.
- Fascitis plantar (espolón)
- Epicondilitis del codo (codo de tenista).
- Aquilodinia.
- Tendinitis rotuliana (rodilla de saltador).
- Síndrome del dolor trocantérico mayor (GTPS).
- Síndrome del abductor y muchas otras tendinopatias crónicas y patologías musculares.
Especialmente para personas activas físicamente y para atletas, las ondas de choque o ESWT supone una opción de tratamiento no invasivo.
Los resultados clínicos de la aplicación en músculos esqueléticos son la reducción del dolor y una restauración de la disfunción muscular, suponiendo una nueva opción de terapia del sistema locomotor. Estudios recientes han mostrado incluso la aceleración de la recuperación de lesiones de nervios periféricos tras la aplicación de Ondas de Choque principalmente en las ramas sensitivas y neurovegetativas.
Las Ondas de Choque atraviesan los tejidos blandos y originan micro-estímulos en el área a tratar o “respuesta biológica”, o mecano-transducción, y de la energía mecánica se produce la biológica por estimulo celular que produce factores bioquímicos con efecto similar a los factores de crecimiento, lo que provoca integración de la neo vascularización o angiogénesis, dando lugar al crecimiento celular, formación del tejido nuevo y crecimiento del mismo, iniciándose el proceso de curación. Se produce migración de células madre del propio organismo en los tejidos tratados con ESWT (atraen Células Madre). Incluso parece que las Ondas de Choque influyen positivamente en la diferenciación de células madre (formando tejido original/evitando la formación de cicatrices).
En lugar de suministrar substancias biológicamente activas, que son fabricadas en laboratorios con un elevado coste y un alto riesgo, las Ondas de Choque, activan el sistema del propio cuerpo para crear estas substancias de forma natural.
Daniel Hernán Cristóbal.
Director de Rehabilitación y de la unidad de Ondas de Choque.
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