La osteoporosis es la enfermedad metabólica más frecuente, conocida como la “epidemia silente”, ya que no presenta síntomas hasta fases muy avanzadas de la enfermedad. Además tiene una prevalencia muy alta, la cual va en aumento en los últimos años.
Un dato que debemos conocer para entender esta enfermedad, es que el tejido óseo está en constante regeneración. Tenemos osteoclastos, que destruyen el tejido óseo, y osteoblastos, que construyen nuevo tejido óseo. Estos deben de estar en equilibrio para no perder densidad ósea, tras la cual aparecerá la osteoporosis.
Osteoporosis ¿Qué debes saber?
La osteoporosis puede presentar síntomas como:
- Fracturas óseas
- Dolor crónico
- Limitaciones funcionales
- Complicaciones potencialmente letales
La manera más efectiva de diagnosticar la osteoporosis es la densitometría.
La edad de aparición de esta enfermedad empieza a ser a partir de los 50 años, estando presente en una de cada tres mujeres, y en uno de cada cinco hombres. Al disminuir la densidad ósea, aumenta el riesgo de fracturas osteoporóticas, siendo las más frecuentes las de vértebras, las de muñeca y las de la cabeza del húmero (cadera).
Factores de riesgo
En esta enfermedad, es fundamental la prevención. Eso incluye evitar factores de riesgo como:
- Tabaco
- Alcohol
- Vida sedentaria
- Obecidad
- Pobre ingesta de calcio y vitamina D
- Desnutrición.
- Amenorrea
- Uso de corticoesteroides
- Diabetes tipo II
- Edad mayor o igual a 65 años
Tratamiento
El tratamiento más importante para la osteoporosis es la prevención. Uno de los factores más importantes es el pico de masa ósea durante la adolescencia y la juventud, el cual vendrá determinado por la actividad física y la alimentación que se haya llevado durante esos años. Los ejercicios más recomendados son los de impacto moderado, ya que este impacto estimulará la formación de nueva masa ósea.
En cuanto al tratamiento una vez establecida la enfermedad, son importantes los siguientes aspectos:
- Ejercicio físico de impacto moderado, 3-4 días a la semana.
- Masaje circulatorio extremidades.
- Termoterapia.
- Electroterapia analgésica (TENS).
- Higiene postural.
Dato curioso
¿Alguna vez has oído que los astronautas suelen sufrir de osteoporosis? Esto se debe a que al encontrarse en el espacio, en ausencia de gravedad, el tejido óseo no recibe ningún tipo de impacto, lo cual altera el ciclo de regeneración del tejido óseo.
Por lo tanto, la natación, que es un deporte con multitud de beneficios para otras patologías, no sería una correcta elección para la osteoporosis; ya que, al igual que en el espacio, en el agua no hay impacto.
Por último, debemos recalcar que el mejor tratamiento para la osteoporosis es la prevención. A través de unos hábitos saludables como una correcta alimentación y un correcto programa de ejercicio.
Referencias:
– Tratamiento de la osteoporosis. M Sosa-Henríquez, D Hernández Hernández. Sociedad Española de Medicina Interna, 2002.
– Osteoporosis: factores de riesgo y estrategias de preveción. AA Gómez Conesa. 22(4), 184-197, 2000.
– Prevención y tratamiento de la osteoporosis con la Actividad Física y el Deporte. JA Martlin Urralde, N Alonso Mondaña. Fisioterapia, 28(6), 323-331, 2006.
– Tratamiento fisioterápico preventivo en osteoporosis. A Prada Rodríguez. Universidad de las Palas de Gran Canaria. 2016.
